Bola de fuego sobre el Lago Erie captada mientras cruzaba el cielo nocturno.

Ryan Connor, de North Royalton, Ohio, capturó una impresionante bola de fuego el 21 de octubre de 2024.
El fenómeno fue visible en amplias áreas de EE.UU. y Canadá. Imagen: Sociedad Americana de Meteoros.


El 21 de octubre de 2024, los cielos sobre el Lago Erie se iluminaron de manera espectacular cuando una brillante bola de fuego atravesó la atmósfera terrestre. Este fenómeno, visible en varias áreas de Estados Unidos y Canadá, sorprendió a cientos de testigos que reportaron el suceso a la Sociedad Americana de Meteoros (AMS). Aunque las bolas de fuego no son tan raras, la magnitud y claridad de esta en particular llamaron la atención de expertos y aficionados. A continuación, profundizaremos en este asombroso evento astronómico.

¿Qué es una bola de fuego?

Una bola de fuego es un meteoro extremadamente brillante que se enciende al entrar en la atmósfera de la Tierra. Se genera cuando fragmentos de asteroides o cometas penetran a gran velocidad, lo que provoca que el material se caliente y brille intensamente. Aunque las bolas de fuego ocurren con cierta frecuencia, algunas de ellas son tan luminosas que pueden verse en grandes áreas geográficas, como fue el caso de la bola de fuego sobre el Lago Erie.

Detalles del evento sobre el Lago Erie

El 21 de octubre de 2024, alrededor de las 10:30 p.m. hora local, una imponente bola de fuego cruzó el cielo nocturno sobre el Lago Erie, siendo visible desde varias ciudades circundantes tanto en Estados Unidos como en Canadá. La Sociedad Americana de Meteoros recibió numerosos reportes sobre el avistamiento, destacando la brillantez y la velocidad del meteoro.

Los testigos describieron el fenómeno como una esfera luminosa que dejó una estela resplandeciente a medida que se desintegraba al entrar en la atmósfera. Aunque este tipo de meteoros a menudo se queman antes de tocar la superficie, algunos fragmentos pueden llegar a caer como meteoritos.


Relevancia científica de las bolas de fuego

Para los astrónomos, cada bola de fuego ofrece una oportunidad única para estudiar el comportamiento de los objetos espaciales al interactuar con la atmósfera de la Tierra. A través del análisis de la velocidad, el brillo y la trayectoria de estos cuerpos celestes, los expertos pueden deducir la composición y el origen del meteoro. El evento sobre el Lago Erie ha generado interés en la comunidad científica, ya que podría proporcionar información valiosa sobre el origen de los fragmentos que causaron este espectáculo.

Implicaciones para la astronomía aficionada

Este tipo de eventos también entusiasma a los observadores del cielo no profesionales. Avistamientos como la bola de fuego sobre el Lago Erie son experiencias inolvidables que inspiran a muchas personas a interesarse en la astronomía. Además, la posibilidad de que algunos fragmentos hayan alcanzado el suelo podría motivar a buscadores de meteoritos en la región, en espera de encontrar restos valiosos.

Testimonios de testigos oculares

Muchos de los testigos que vieron la bola de fuego sobre el Lago Erie relataron su asombro por la magnitud del evento. "Era como ver un pequeño sol cruzando el cielo", comentó uno de los observadores. Los reportes de la AMS indicaron que el meteoro fue visible en varias ciudades cercanas, lo que aumentó la cantidad de avistamientos documentados.


Conclusión

La bola de fuego sobre el Lago Erie fue un evento celeste de gran impacto que fascinó tanto a observadores casuales como a científicos. Estos fenómenos, aunque no raros, siempre capturan la atención por su belleza y por las preguntas que plantean sobre el universo y nuestro lugar en él. A medida que la ciencia avanza, cada bola de fuego nos brinda más oportunidades para aprender sobre los misterios del cosmos.

Fuente: AMS/EarthSky 

Edición: informante A.